Enrique Díaz, presidente de MC&F, sostiene que el nuevo reglamento de la SBS para los bancos que asumen mayores riesgos debe tener fundamentos reales que no generen distorsiones en el sistema. “No se puede tratar a todos por igual”, asegura.
Dentro de las nuevas reglas que la Superintendencia de Banca y Seguros (SBS) implementará este año está la mayor exigencia de provisiones a los bancos que asumen mayores riesgos. Ello con el fin de reducir su exposición, especialmente en créditos de consumo, los cuales, se han incrementado considerablemente en los últimos años.
“Con el tiempo, esto va a hacer que los bancos se vayan inhibiendo de créditos muy largos o, si quieren mantener eso, les va a costar más porque van a tener que provisionar. Esto significa más capital de parte de su parte, lo cual puede tener un efecto nocivo en la tasa de interés”, asegura Enrique Díaz, presidente de Mercados de Capitales, Inversiones y Finanzas (MC&F), y autor del Blog Educación financiera para todos.
Como se sabe, la SBS ha identificado altos riesgos en el otorgamiento de créditos de consumo mayores a tres años, por lo que, ante el otorgamiento de líneas de crédito que sobrepasen el tiempo límite, los bancos deben provisionar cantidades cada vez mayores.
En ese sentido, Díaz sostiene que la SBS debe tener “fundamentos reales” para la puesta en marcha de estas medidas, de modo que se eviten distorsiones en el sistema.
“Lo primero que se debería ver es cómo es ahora. Si el promedio está en 4 años, parto por ahí. Y se debería mover de a pocos hacia abajo, según lo que se quiere. El número ‘tres’ es un número mágico, entonces, deben tener fundamentos reales, o afinamiento, para no generar distorsiones”, refiere.
Explica que la SBS debe considerar que existen dos tipos de créditos de consumo: los abiertos y los que son por descuento de planilla. Estos últimos, al tener un perfil más seguro de cobro para los bancos, presentan una tasa de morosidad más baja que los primeros. “Es por ello que no se puede tratar a todos por igual”.
Asimismo, señala que las reglas deben ser correctamente analizadas , pues el impacto es distinto para las diversas entidades. “Las medidas de esta naturaleza no deben ser discriminatorias. No se puede cargar demasiado a un banco frente a otro porque alguien va a decir que estas favoreciéndolo”. (gestion.pe)